El registro de marca es el procedimiento ante la Superintendencia de Industria y Comercio el cual es realizado por parte de un interesado, el solicitante puede ser persona natural o jurídica y recomendablemente debe contar con un apoderado, con el fin de que le sea reconocido la titularidad sobre un signo distintivo, este como aquel emblema que diferencia los productos o servicios que se ofertan en el mercado. El proceso de registro de marca se encuentra dividido en tres etapas: examen de forma, publicación y examen de fondo.
Surtido el proceso anteriormente definido, se crean derechos para la persona a la cual se le concedió la marca, derechos de exclusividad del uso de la marca, poderla ceder y hasta efectuar un reconocimiento económico por dicha concesión ya que hasta puede ser objeto de embargo en caso de un eventual proceso. El uso exclusivo de la marca puede conllevar el respeto de todas las personas en general para su aprovechamiento, por lo tanto, si se cuenta con el registro de marca se puede perseguir a todas las personas que realicen su uso sin el permiso correspondiente, lo cual puede llevarse hasta instancias judiciales.
Para concluir, todo depende de si efectivamente se cuenta con el registro de marca, respecto de los logos y las enseñas comerciales para poder exigir a terceras personas que no realicen uso de las mismas y en caso continuar se puede acudir ante instancias judiciales y administrativas para requerir el respeto por la marca concedida.
DANIEL MOLINA MUÑOZ
Asesor Jurídico Empresarial.
