La igualdad salarial tiene por objeto censurar la permisión de factores o circunstancias de inequidad en las relaciones de trabajo para, de ese modo, hacer prevalecer la igualdad de trato frente a similares situaciones laborales de productividad y eficiencia,
Por lo tanto, tratándose de la igualdad en materia laboral, no basta la identidad de cargos o puestos de trabajo entre quienes se quiere hacer la comparación, sino que se requiere, en cada caso, verificar que la diferencia salarial y prestacional solo puede ser atribuida a circunstancias subjetivas, habida cuenta de que lo que se pretende conjurar es la discriminación ante circunstancias objetivamente idénticas, por otro lado para que no se presente la desigualdad laboral, el empleador debe demostrar mediante circunstancias objetivas la razón de la diferencia salarial.