Actualmente nos encontramos en una era digital, que permite tener a disposición todo tipo de herramientas tecnológicas, entre ellas el equipo celular, mediante el cual tenemos contacto con nuestra familia, amigos y desarrollamos actividades laborales, lo cual es más común de lo que podríamos pensar, teniendo en cuenta lo anterior no encontramos en el Código Sustantivo de Trabajo regulación alguna con respecto al uso del celular en el puesto de trabajo.
En virtud de la necesidad de establecer unos parámetros mínimos respecto al uso del celular, la jurisprudencia ha señalado que el manejo del celular debe encontrarse regulado por el reglamento interno de trabajo y su restricción no debe ir en contra del libre desarrollo de la persona, así las cosas, el uso del celular no es malo si se regula de manera correcta y no afecta la productividad de los colaboradores, es importante tener en cuenta que, el uso del teléfono celular en espacios laborales no puede ser una causal de despido.
Conforme a lo anterior, tenemos como precedente la Sentencia T-690/2015, la Sala Sexta de Revisión de la Corte Constitucional concedió el amparo de los derechos fundamentales a la estabilidad laboral, al mínimo vital, a la seguridad social y a la libertad de comunicación de un trabajador que fue despedido por haber ingresado y usado el celular en su puesto de trabajo, contraviniendo la prohibición contenida en su contrato de trabajo y las políticas de seguridad de la información exigidas por la empresa.
El caso objeto de análisis en dicha sentencia fue especial debido a que el trabajador no tuvo en cuenta las razones de fuerza mayor que llevaron al uso del celular y puso fin a la relación laboral con una falta que puede ser catalogada como leve, el proceso disciplinario puede regular el uso del celular cuando es indebido y denota una afectación en el correcto funcionamiento de las labores pero no es causal justa de despido.
