El decreto 047 de 2000, regula lo concerniente a las normas sobre afiliaciones, el artículo tercero establece lo siguiente:
“2. Licencias por maternidad. Para acceder a las prestaciones económicas derivadas de la licencia de maternidad la trabajadora deberá, en calidad de afiliada cotizante, haber cotizado ininterrumpidamente al sistema durante todo su período de gestación en curso, sin perjuicio de los demás requisitos previstos para el reconocimiento de prestaciones económicas, conforme las reglas de control a la evasión.
Lo previsto en este numeral se entiende sin perjuicio del deber del empleador de cancelar la correspondiente licencia cuando exista relación laboral y se cotice un período inferior al de la gestación en curso o no se cumplan con las condiciones previstas dentro del régimen de control a la evasión para el pago de las prestaciones económicas con cargo a los recursos del sistema general de seguridad social en salud.”
De conformidad con lo mencionado anteriormente, para que la EPS deba cubrir el valor de la licencia de maternidad se requiere que el empleador haya cotizado al Sistema General de Salud, por cuenta de la trabajadora, durante todo el tiempo de la gestación, así mismo, en el caso de las trabajadoras independientes.
Esto quiere decir que, si una trabajadora se afilia a la EPS y por consiguiente inicia a realizar aportes un mes después de quedar embarazada, la EPS sólo reconoce la licencia de maternidad en proporción al tiempo cotizado debiendo el empleador asumir lo que haga falta, pues en todo caso la empleada debe disfrutar de su licencia de maternidad en el tiempo establecido por la ley.
En varias oportunidades la Honorable Corte constitucional ha reiterado que en el caso de que le trabajadora cotice por un tiempo inferior al periodo de gestación, habrá lugar al pago proporcional de la licencia de maternidad.
María Camila Pulgarín
Asesora Legal Empresarial
