La convención sobre el derecho al mar de Naciones Unidas, aprobada en 1982, determinó que cada país puede ejercer soberanía en el mar que lo rodea siempre y cuando sea de la siguiente forma:
- La anchura de su mar territorial no podrá ser superior a 12 millas.
- La zona económica exclusiva es la situada más allá del mar territorial. Para la explotación y jurisdicción sobre esta zona no puede exceder de más de 200 millas.
- La plataforma continental comprende el lecho y el subsuelo de la zona del mar que se extiende más allá del mar territorial, se extiende durante 200 millas.
Esto quiere decir que fuera de los límites anteriormente descritos se considera como aguas internacionales, las cuales claramente no constituyen ningún tipo de patrimonio en beneficio de un Estado, por lo tanto, se consideran como zonas de libre tránsito, pesca y explotación para todos los Estados, recibiendo un derecho a navegar, sobrevolar sin solicitar autorización o dar explicaciones por el tránsito realizado. Esto siempre y cuando este sea probado con fines pacíficos; así pues, al no tener un Estado que las vigile, esta labor está regulada por la Convención de Naciones Unidas.
