Dentro del régimen de pensiones, existen 3 modalidades: el retiro programado, la renta vitalicia y el retiro programado con renta vitalicia. Estas aplican para los tres tipos de pensiones, es decir, la de vejez, la de invalidez y la de sobrevivientes.
Dentro del marco legal, las tres modalidades de pensión deben ser tratadas de manera rigurosa, oportuna y con la debida atención, pues cada una de ellas interfiere en los tres tipos de pensión independientemente del régimen al cual se encuentre afiliada la persona. Es por ello que con respecto a la asesoría legal, las tres modalidades deben ser analizadas y tratadas por un profesional conocedor del tema, esto en pro de validar el beneficio para el afiliado sobre cuál de las tres modalidades le es más favorable y cómo puede acceder a esta.
Se hace necesario entender la finalidad de cada modalidad, de conformidad del estatus y requisitos que tenga cada uno de los afiliados interesados en aplicar. Las tres modalidades de pensión para la administración y financiamiento del beneficio pensional parten de la premisa de los criterios para escoger la que mejor se ajuste al capital y necesidades del sujeto, para ello lo más recomendable es buscar asesoría en el fondo de pensiones al cual se encuentre afiliado.