A pesar de que el trabajo en casa es muy beneficioso tanto para el trabajador como para el empleador, si no revisamos de manera detallada esta práctica se puede incurrir en un sin número de riesgos para los trabajadores y en una complejidad para la compañía, como lo pueden ser los accidentes laborales y enfermedades laborales tales como la preocupación por parte de la carga laboral, el tiempo, depresión, ansiedad, insomnio, sensación de soledad y estrés; los anteriores derivados de largas jornadas de trabajo y, en otros casos, de aislamiento de sus grupos de trabajo.
Se pueden mitigar estos riesgos con la revisión de las políticas de seguridad y salud en el trabajo, implementando nuevos hábitos o estilos de vida saludable y una adecuación y seguimiento del puesto de trabajo en casa del colaborador de la compañía. Esta revisión la deberá realizar, previa autorización de la empresa, el trabajador de seguridad y salud en el trabajo, para que la compañía cumpla con todos estos parámetros.
De manera tal que para conocer los riesgos que puede tener el trabajador se tendrán que revisar el lugar de trabajo y el encargado de la empresa deberá realizar los siguientes procedimientos para mitigar cualquier tipo de accidente: espacio de trabajo adecuado, escritorio ideal, silla ergonómica, herramientas de cómputo (pantalla, teclado, mouse, portátil), condiciones de ambiente (iluminación, ruido), gestión de la empresa, horario de trabajo, desconexión laboral, hábitos y estilo de vida.
