En medio de la ejecución de ciertas tareas, los trabajadores pueden verse afectados por situaciones impredecibles e incontrolables que podrían afectar su salud. Por lo tanto, se requiere un análisis de la situación para determinar si es necesario activar de manera inmediata el sistema completo de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo. Un accidente de trabajo se define como un evento no deseado que resulta en daño para la salud del trabajador y, por lo general, conduce a la incapacidad del mismo.
Un incidente de trabajo se refiere a un evento no deseado que podría o no resultar en daño. Por lo tanto, los incidentes no siempre conducen a la incapacidad y, en su mayoría, se utilizan para mejorar la gestión de seguridad y salud laboral. Si bien el sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo tiene implicaciones en ambas situaciones, las etapas que se deben seguir son diferentes.
En un accidente de trabajo, es necesario investigar, sancionar y corregir. En cambio, en el caso de un incidente, es suficiente con el proceso de mejora, donde se busca prevenir futuros eventos similares. Además, en un accidente, se deben involucrar entidades externas, como las ARL, mientras que en un incidente, el manejo y la intervención son internos.
Por lo tanto, se recomienda analizar cada situación que se presente en la actividad laboral cotidiana y tomar medidas preventivas para evitar involucrar nuevas entidades y el agotamiento de todo el sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo