Como punto de partida, se debe indicar que el código de comercio señala que el Registro Mercantil tiene por objetivo llevar el control y la matrícula de los comerciantes y de los establecimientos de comercio.
En este sentido, se entiende por comerciante aquellas personas que ejercen el comercio de manera profesional; asimismo, se entiende por establecimiento de comercio como aquel conjunto de bienes que se utilizan con el objetivo de desarrollar la actividad comercial de la empresa o compañía. Frente a esto, podemos traer como ejemplo tiendas, supermercados, locales, fábricas, restaurantes, etc.
Ahora bien, el Registro Mercantil comprende tanto la matrícula de los comerciantes y establecimientos de comercio como la inscripción de los actos, libros y todo aquel documento que requiera dicha formalidad. Aunado a la inscripción de la constitución reformas y demás actos relacionados. Lo cual, permite que los actos realizados se hagan oponibles a terceros y que dichos actos se hagan visibles frente a potenciales clientes.
Es importante tener en cuenta que, el Registro Mercantil es público y se lleva a través de las cámaras de comercio dependiendo del respectivo territorio y jurisdicción.
Tenga en cuenta que anualmente antes del 31 de marzo, se debe efectuar la renovación de la matrícula mercantil de todos los comerciantes, sin que sea indispensable que se realice en la fecha en que se realizó su respectiva inscripción.
Finalmente, tenga en cuenta que dentro de los actos y documentos que se deben inscribir se encuentran, las escrituras de constitución de las sociedades, reformas, liquidación, acuerdos de reestructuración, contratos de compraventa con reserva de dominio, enajenaciones, a arrendamientos que se den sobre los establecimientos de comercio inscritos.
