El procedimiento de indemnización de daños y perjuicios, tiene como objetivo la reparación o compensación por el perjuicio que se ha originado. Esto mediante restablecimiento al estado anterior del daño o una compensación por aquello que se ha perdido y no se puede reparar. En cuanto al valor de la indemnización se debe establecer en cada caso en concreto ya que la norma no lo específica.
En el incumplimiento contractual y extracontractual se debe definir dentro del contrato, cuando se incumple dentro de las cláusulas del acuerdo la indemnización es la compensación por el daño causado dentro del curso del mismo después de la terminación de este. Dentro de los daños indemnizables se establece daño emergente, lucro cesante y daño moral. El daño emergente se define como una perdida posible de valora o cuantificar; el lucro cesante hace referencia a todos los ingresos que el afectado ha dejado de percibir o no pudo cobrar por los respectivos daños sufridos para lo cual se necesita la existencia de pruebas y adicional a esto un nexo causal; mientras que el daño moral, tiene relación con el valor personal a la dignidad el honor, el buen nombre, generalmente se vinculan los daños psicológicos, impactos emocionales que se vincule con el nexo causal.
En cuanto el procedimiento a seguir cuando se presente alguna afectación, se debe proceder con el cálculo de los factores anteriormente mencionados; así mismo, realizar la identificación plena de las partes pretensiones y hechos relacionados a los sucesos, esto ante la jurisdicción civil.
