La Corte Constitucional ordenó a la Registraduría Nacional reconocer el género no binario en las cédulas de ciudadanía, dicha acción de manera directa hace que los diferentes espacios de convivencia y desarrollo que se han creado con una base normativa tradicional tengan que cambiar, para asegurar a cada uno de sus participes el cuidado y respeto a sus derechos fundamentales. En el ámbito laboral la determinación tomada por la Corte tiene varias implicaciones no solo a futuro, pues este reconocimiento generó que los empleadores deban tomar medidas para que se dé un correcto ambiente laboral dentro de sus instalaciones.
Ahora bien, frente a la influencia en esta acción en el ámbito laboral a futuro, se observa el reconocimiento de la seguridad social pues la Corte Constitucional no solo ordenó agregar dicha información en documento público también dictaminó que se hiciera todo un desarrollo para el trato de las personas que se identifican bajo este género. A pesar que, se haya hecho claridad en que el género y el sexo son temas diferentes es necesario que se haga claridad en cómo se desarrollará por ejemplo el otorgamiento del derecho de la pensión pues si uno de sus requisitos es el sexo (hombre o mujer) la persona reconocida con género no binario deberá identificarse con uno de estos dos para obtener la protección establecida para la vejez, sobrevivencia e invalidez generando de esta forma una violación a los derechos fundamentales de la misma.
De esta manera, la determinación de la Corte Suprema de Justicia establece un reto para el ámbito laboral donde deberá apoyarse en las diferentes políticas y comités apoyados por el Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el trabajo para crear un ambiente sano y productivo que permita a las personas identificadas bajo dicho género llevar un desarrollo respetuoso y permitiendo la protección de sus derechos fundamentales en cualquier espacio de participación laboral.