En Colombia, la Ley 100 de 1993 establece los requisitos para adquirir la pensión por vejez. Según esta normativa, los hombres deben tener 62 años de edad y haber cotizado 1.300 semanas, mientras que las mujeres deben cumplir 57 años de edad y también haber cotizado 1.300 semanas. Sin embargo, muchas personas que alcanzan estos requisitos encuentran que la mesada pensional no es suficiente para cubrir sus necesidades, lo que los obliga a reingresar al mercado laboral. Asimismo, hay quienes, a pesar de cumplir con la edad de pensión, no logran completar las semanas de cotización y deben seguir trabajando. Esta situación se complica porque muchas empresas no priorizan a este tipo de perfiles al momento de contratar.
Para abordar esta problemática, el Ministerio del Trabajo lanzó el programa Sello Amigable Adulto Mayor, diseñado para incentivar a las empresas a contratar adultos mayores. Este programa ofrece beneficios tributarios importantes, como una deducción del 120 % en el impuesto sobre la renta por la contratación de adultos mayores durante un mínimo de un año. Además, este programa actúa como un factor de desempate en los procesos de licitación pública.
Según las reglas del programa, las empresas que opten por el Sello Amigable deben garantizar que al menos el 2.5 % de su planta de personal esté conformado por adultos mayores, en el caso de empleadores con menos de 100 trabajadores. Este porcentaje incrementa en un 0.5 % por cada 100 empleados adicionales, sin exceder el 5 % de la planta de personal.
Con esta iniciativa, el Ministerio del Trabajo busca disminuir el desempleo en esta población vulnerable, mitigar la pobreza entre los adultos mayores en Colombia y garantizar su acceso a un mínimo vital que les permita una vida digna.