En Colombia la libertad contractual, es esa facultad que tienen las partes en un contrato para acordar las condiciones que regirán el mismo. No obstante, existen contratos que para que se perfeccionen hay que cumplir con ciertas solemnidades tal como lo contempla el artículo 1500 del Código Civil Colombiano, también existen límites contractuales; el mejor ejemplo son los contratos laborales donde podemos ver que existe una remuneración mínima, una jornada máxima y ciertas obligaciones para cada una de las partes, obligaciones que no son negociables.
Ahora bien, en los contratos pueden establecerse cláusulas que favorecen únicamente a una de las partes y que generan un desequilibrio contractual evidente, en la mayoría de casos actuando en contravía al principio de buena fe, estas clausulas son conocidas como clausulas abusivas o leoninas.
Las clausulas leoninas son estipulaciones que violan un principio fundamental en derecho; el de “conmutatividad del contrato”, entendiéndose esto como que cada una de las partes se obliga a dar o hacer una cosa que se mira como equivalente a lo que la otra parte debe dar o hacer a su vez, este tipo de clausulas se evidencia con mas frecuencias en los contratos de adhesión, pero esto no limita a que se pueda presentar en otro tipo de contratos.
Dr. Germán Gutiérrez Quintero