Si bien bajo la figura de la subordinación el empleador pueden aumentar las funciones de un trabajador, este proceso debe realizarse sin que se hable de la vulneración de los derechos fundamentales de los mismos. Por lo anterior, siempre que se haga la asignación de funciones temporales en razón a fuerza mayor, deberán sujetarse a la naturaleza de la ejecución y la jerarquía.
Si se ejecuta la asignación de funciones de forma desproporcionada, así las mismas tengan la naturaleza de temporal, podrán determinarse como una desmejora laboral, y por lo tanto los trabajadores podrán tomar acciones en contra de la entidad. La situación de desmejora podrá relacionarse con sobrecarga laboral, desmejora salarial o descalificación con relación a su calidad educativa y profesional.
De esta manera, se recomienda que si hay una situación de fuerza mayor o caso fortuito, se realice una asignación temporal de funciones que tenga una duración enmarcada en la anomalía y se establezcan las responsabilidades, beneficios y alcance que se tendrán por este tiempo.