Durante el desarrollo de sus actividades laborales los colaboradores pueden verse envueltos en situaciones que los lleven a sufrir afectaciones físicas, incluso a pesar de regirse por todos los lineamientos de seguridad y la reglamentación del sistema de gestión. Estos accidentes pueden afectar a los trabajadores en lo que a su salud y su bienestar se refiere, y esto, a su vez puede tener un impacto negativo en su rendimiento laboral, como retrasos en la actividad económica y faltas en la producción. Lo que podría tener como consecuencia la indirecta intención del empleador de querer desistir de ese trabajador o buscar una forma de suplir su ausencia. Sin embargo, esta acción podrá poner en riesgo al empleador y cuestionar ¿Hasta qué punto el trabajador cuenta con una situación de protección en relación con su condición médica?
Es necesario entonces analizar lo que se entiende como debilidad manifiesta. Esta puede estar relacionada no solo a la condición médica que tiene el trabajador de manera inmediata, sino que se extiende en el tiempo de acuerdo a la condición del mismo, por lo tanto, no depende de un porcentaje de pérdida de capacidad, por el contrario, depende de la evolución del hecho. Así, el trabajador tendrá una condición de protección cuando cuente con incapacidades vigentes, terapias, controles, citas con especialistas proyectadas en un futuro y que son necesarias para su recuperación. Entonces debe evitarse el pensamiento de que el porcentaje de pérdida de capacidad determina la condición especial del trabajador, si bien es un factor importante, el mismo no se relaciona con la estabilidad manifiesta.
De la misma forma, es relevante tener en cuenta que cada una de las condiciones médicas es única y que la debilidad manifiesta no está relacionada con accidentes laborales, sino que también se puede presentar por padecimientos comunes, ajenos al mundo laboral. Es por esto que deben obtenerse certificaciones no solo por parte de la ARL, sino de la EPS para tener total conocimiento de la situación médica del trabajador, de esta forma se podrá reconocer si se está frente a una debilidad manifiesta y proyectar el vínculo laboral.