El PME (Plan de Movilidad Escolar) es un instrumento participativo de planificación, implementación y mejora educativa en relación con las acciones de movilidad escolar en escuelas, colegios y liceos. Su objetivo es promover la asistencia a clases de todos los niños, niñas, adolescentes y jóvenes a las instituciones educativas, fomentando la cultura vial y previniendo y disminuyendo las lesiones y muertes en siniestros viales, dado que estos son los actores más vulnerables en la vía.
Estas estrategias se articulan con el Proyecto Educativo Institucional (PEI), que establece los procesos de mejora educativa, es decir, la gestión institucional y pedagógica, proporcionando un desplazamiento seguro para proteger la vida de los miembros de la comunidad educativa y fortalecer sus procesos institucionales y pedagógicos. Esto está en línea con el artículo 56 de la Ley 769 de 2002, que establece la obligatoriedad de la enseñanza de educación vial de manera sistemática en la educación preescolar, básica primaria y básica secundaria, promoviendo la formación de hábitos, comportamientos y conductas seguras en la vía.
Una de las estrategias consiste en identificar los riesgos viales según el medio de transporte que utilizan los estudiantes en su desplazamiento desde casa hasta el colegio, así como los trayectos que utilizan y su entorno.
Para elaborar un correcto Plan de Movilidad Escolar, este debe estar compuesto por 7 pasos para su implementación y ejecución:
- La conformación del comité de movilidad
- El diagnóstico de movilidad
- La matriz de riesgos
- La política de movilidad escolar
- El plan de acción
- El seguimiento y evaluación
- La organización de evidencias.