En primera medida, es importante tener en cuenta que la estabilidad laboral reforzada procede para personas que se encuentran en una situación de discapacidad o en una posición de debilidad manifiesta debido a su condición de salud, afectando el desempeño de sus labores. Recuerde que cuando se presenta esta estabilidad laboral reforzada, la forma del contrato laboral puede verse afectada.
Por ello, es relevante indicar que los trabajadores que cuenten con estabilidad laboral reforzada, en el caso eventual de que requieran dar por terminado el contrato de trabajo suscrito, deberán hacerlo bajo causales objetivas y, de igual manera, contar con la previa autorización del Ministerio de Trabajo. De no tenerse en cuenta esto, el alto tribunal manifiesta que se configuraría una presunción de despido discriminatorio.
Tenga en cuenta que la discapacidad se determina bajo la causal de barreras que se presentan en la sociedad, lo que quiere decir que resulta ser una afección del cuerpo o la mente que implica una deficiencia para la ejecución y participación en determinadas actividades. Por otro lado, la situación de debilidad manifiesta se caracteriza por una condición relacionada con el estado de salud del trabajador.
Dicho esto, para poder determinar si una persona efectivamente cuenta con situación de estabilidad laboral reforzada debido a su estado de salud o condición de discapacidad, y para que proceda dicha estabilidad, se deberá tener en cuenta lo siguiente:
- Establecer la condición de salud que afecta el desempeño de las labores del trabajador.
- El empleador deberá conocer la condición de discapacidad o de debilidad manifiesta del trabajador.