En primera instancia se precisa que, el contrato de agencia comercial busca que por un lado el agenciado encargue al agente la promoción y explotación de sus negocios, entendiéndose así que, con la celebración del acuerdo de voluntades, nace a la vida jurídica, determinadas obligaciones de las partes, tales como:
- Cancelar al agente la remuneración como contraprestación a la labor de permanencia y promoción de determinado negocio.
- Finalizado el contrato, se deberá pagar al agente las sumas que se causen con ocasión a las cesantías comerciales (equivale a la doceava parte del promedio de la comisión, regalía o utilidad recibida en los tres últimos años). De conformidad con lo anterior, la Honorable Corte Suprema de Justicia, se ha manifestado indicando que la renuncia a las cesantías comerciales puede hacerse de mutuo acuerdo entre las partes.
- Dentro de otras obligaciones, también encontramos la de promover y explotar de manera correcta el negocio del agenciado y a su vez de manera independiente dentro de un determinado ramo y en una zona preestablecida del territorio nacional de acuerdo con las instrucciones dadas por el agenciado.
Finalmente, se precisa que partiendo de las obligaciones contractuales el agente de manera regular, se encuentra en la responsabilidad de reportar al agenciado los informes sobre el estado del negocio en la zona en que se desarrolle su labor.
Dra. Paola Páez
Actualidad Jurídica Empresarial
